Desde el crucero de Santa Cruz en Bruzual, pasando por Chaguaramas, Valle Guanape en Carvajal y San José de Guaribe en el estado Guárico, hay más de 30 kilómetros de carretera con hundimientos, falta de bordes y cabezales, deterioro de la carpeta asfáltica y como siempre muy poca señalización. Este tramo, como muchos otros, representa una guillotina. Numerosas familias han perecido transitando la zona. No obstante, la inexistente vialidad rural representa parte de las condiciones nunca dadas en 11 años de desgobierno para el desarrollo. Algunas carreteras tienen un poco de asfalto, pero como que se lo colocaron con espray porque está lleno de huecos.
Ejemplo de eso es la parroquia Guanape de Bruzual. Y, aunque Sabana de Uchire no se queda por fuera, porque subir hasta allá implica rezar aunque sea tres misterios, y en Clarines ir para El Cuatro y Santa Clara es una experiencia 4x4 bastante desalentadora, los caseríos de Guanape están desprovistos de toda política pública eficiente. ¿Qué más queda si no hay gobierno que responda?
Esa parroquia, llena de gente valiosísima como Jesús Rosalino “Chalino” Figueroa, violinista de 84 años de edad por demás de conocido, ha vivido por años lo que es ser una caja de votos para los políticos que “cuando se montan se olvidan de todo mundo”. No hay financiamiento para el pequeño comerciante, ni ayuda al desempleado. Sólo queda soledad, no han funcionado las propuestas del Socialismo del Siglo XXI.
Es por eso que el Presidente no se apareció en el evento oriental del PSUV para las patrullas revolucionarias que costó aproximadamente 5 millones de bolívares fuertes y ameritó 350 autobuses, para una movilización que no llenó ni la mitad del estadio de futbol Simón Bolívar de Barcelona. Y a este último, el Libertador, se le hará un sarcófago de cristal y oro, carente de los principios que en abundante correspondencia suscribe sobre lo importante de administrar nuestros “pocos” recursos para el desarrollo de la patria. Mayor crisis en el oficialismo.
En evidencia su mala gestión. Ejemplo, el municipio Carvajal. Valle Guanape espera la planta procesadora de maíz inconclusa desde 2005, la casa de la cultura que desde hace ocho años no terminan, que cese el racionamiento de luz y agua, y que la última llegue limpia. Cuatrocientos millones se le invirtieron al nuevo matadero municipal y sólo tiene movimiento de tierras desde hace tiempo. El programa de guarderías Simoncito no está culminado y cuenta con tres empleos para tanta gente capacitada en ese sector. El alcalde paseando por Puerto Píritu, comenta la comunidad, y sólo hay una patrulla para todo el municipio y está sin parabrisas. Igualmente, una sola ambulancia para el hospital de Carvajal. Después que cerraron el banco Canarias la economía ha tenido cientos de tropiezos, no hay entidad bancaría, ni siquiera una oficial de tantas expropiadas. ¿Y cuál revolución?
Ángel Arellano
www.angelarellano.tk
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